Brasil se comprometió con la unión aduanera
Brasil dará atención prioritaria a la eliminación del doble cobro del Arancel Externo Común (AEC) del Mercosur para consolidar la unión aduanera del bloque durante la presidencia pro tempore de su país, dijo ayer en Montevideo el canciller brasileño, Celso Amorim.
Al mismo tiempo, dijo que Brasil tiene el firme propósito de reactivar las negociaciones del Mercosur con la Unión Europea (UE), estancadas desde 2004 a la espera del resultado de la a la postre fracasada Ronda de Doha.
Amorim presentó ante el Parlamento del Mercosur (Parlasur) los temas que Brasil impulsará hasta diciembre, cuando traspase la presidencia pro tempore a Paraguay.
En primer lugar, quiero resaltar una cuestión que, a mi modo de ver, exigirá atención prioritaria y urgente: la eliminación del doble cobro del Arancel Externo Común, lo que será un paso de enorme trascendencia para la Unión Aduanera, dijo el canciller al Parlasur.
Brasil está firmemente empeñado en que el Mercosur dé ese paso, definitivamente, en este semestre, por lo que ya estamos trabajando con ahínco para definir un mecanismo justo y equilibrado para la distribución de la renta aduanera, agregó.
La consolidación de la Unión Aduanera es lo que realmente dará fuerza al Mercosur como actor en el escenario internacional; será un avance excepcional para la consolidación interna del bloque, y abrirá nuevas oportunidades para el desarrollo integrado de las cadenas productivas, afirmó.
Asimismo, traerá efectos positivos al comercio intrazona, facilitará las negociaciones externas del bloque tanto con la Organización Mundial del Comercio (OMC), con la UE, y otros.
Amorim manifestó el compromiso de Brasil de luchar contra las asimetrías entre los socios del bloque regional y superarlas en el marco de un Plan Estratégico que se negocia desde hace tiempo y al que aspira dar conclusión.
El canciller brasileño dijo que su país buscará avanzar en un Fondo de Apoyo a las Pequeñas y Medianas Empresas, que tendrá impacto en reducir las asimetrías.
Ronda de Doha. Asimismo, dijo que Brasil tiene el firme propósito de reactivar las negociaciones para un Acuerdo de Asociación Interregional con la Unión Europea que podrá resultar en importantes ganancias comerciales, en especial para los socios menores del Mercosur.
En cuanto a la OMC, Amorim dijo que la falta de consenso en la conclusión de la Ronda de Doha (…) no es sinónimo de parálisis, pues pese a que no se cerró un acuerdo, avanzamos en varios puntos, y tenemos el deber de continuar buscando consensos para concluir la Ronda.
Señaló que las negociaciones de Ginebra fueron un aprendizaje para el Mercosur y que las divergencias son normales en una negociación de tamaña complejidad, en referencia a las distintas posturas de Brasil y Argentina. (AFP)